Milenial, bioestimulante a base de aminoácidos, ha sido aprobado como insumo FIBL para su uso en cultivos certificados Demeter.
Se trata de una marca que garantiza que los productos han sido cultivados y/o procesados de acuerdo a los principios de la agricultura biodinámica. Los productores y procesadores de estos productos han sido previamente certificados por una organización Demeter autorizada. Este proceso incluye la verificación del proceso productivo completo en cumplimiento con la Normativa Demeter de producción y elaboración, desde el cultivo en campo hasta el envasado del producto final.
La Oficina de Certificación Demeter España forma parte de una estructura a nivel internacional, de modo que su forma de trabajar, principios y procedimientos son compartidos, auditados y avalados por Demeter-International.
La agricultura biodinámica es un enfoque holístico de la agricultura en la que la prioridad es la vitalidad, esto es, los agricultores devuelven a la tierra más de lo que quitan cuando cultivan o crían animales. La finca se considera como un organismo en el que las plantas, los animales y los humanos están conjuntamente integrados.
La agricultura biodinámica tiene su origen en 1924, a raíz de un ciclo de conferencias impartidas por Rudolf Steiner. La diferencia más significativa de este tipo de agricultura es que se trabaja en sinergia con la naturaleza, no solo con las necesidades materiales, consiguiendo así un equilibro respetuoso con el medio ambiente. Para conseguir este objetivo, un aspecto fundamental es programar la siembra y la cosecha en días favorables siempre que sea posible.
Demeter Internacional dispone de una base de datos de insumos autorizados que es gestionada a través de la organización FIBL (Instituto de Investigación en Agricultura Orgánica), con sedes en Suiza, Alemania, Austria, Hungría, Francia y Bruselas. Esta organización se encarga de evaluar si los insumos cumplen con esta normativa.
Dicha base de datos se puede consultar en el este enlace.
Un reciente estudio realizado por el FIBL, publicado en la revista “Scientif Research” compara las emisiones de óxido nitroso (el gas de efecto invernadero más importante en la agricultura) producido por cultivos herbáceos (trigo, pasas, maíz y soja) con tres sistemas de producción: biodinámico, biorgánico y convencional.
Como resultado se observó que las áreas cultivadas en producción ecológica tenían en torno a un 40% menos de emisiones de óxido nitroso por hectárea, en comparación con la producción convencional y en términos de rendimiento, el sistema biodinámico tuvo las emisiones más bajas de óxido nitroso.
Los autores apoyan el uso selectivo de rotaciones de cultivos y enmiendas para mantener las importantes funciones del suelo. Esta afirmación está respaldada por el hecho de que los indicadores más importantes de la fertilidad del suelo, como el pH ácido del suelo, la materia orgánica y la biomasa microbiana en el suelo se correlacionaron negativamente con las emisiones de óxido nitroso. Los resultados del estudio ahora tendrán que ser transferidos a diferentes suelos, regiones y sistemas de cultivo a través de más estudios a largo plazo.
Puedes consultar el estudio completo aquí.
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