El cuajado es el fenómeno natural mediante el cual una flor pasa a ser un fruto válido. De la buena formación de flores depende la cantidad y calidad de cosecha. En los cultivos hortícolas como el melón y sandía, el cuajado es esencial para generar una buena cosecha. Para ello es necesario una óptima fecundación y una cantidad suficiente de flores con un polen abundante y fértil, para que las abejas polinizadoras realicen su trabajo exitosamente.
Cuando comienza el desarrollo del fruto se produce una primera fase que se caracteriza por numerosas divisiones celulares que dan lugar a un rápido crecimiento de los tejidos del ovario. Más adelante, cuando disminuye la división celular, el fruto continúa su crecimiento a través de la expansión celular hasta que alcanza su tamaño final.
Para que se produzca el cuajado es necesaria una correcta regulación hormonal y un aporte de elementos nutritivos, ya que el desarrollo inicial de los frutos depende de dicho aporte debido al gran gasto energético que supone. Si estos requisitos no se cumplen puede desencadenar la caída o absición de flores o frutos no cuajados.
La aplicación de correctores de carencias y bioestimulantes desarrollados para mejorar las condiciones de la planta durante estos procesos, permiten favorecer la producción de polen, su germinación y desarrollo del tubo polínico, a la vez que preparan a la planta para que la floración y el cuajado sean más favorables.
La deficiencia de fósforo en los cultivos supone un factor limitante para el crecimiento de la planta ya que interviene en multitud de procesos metabólicos:
- Biosíntesis de lípidos: actúan como reserva energética para la planta.
- Síntesis de clorofila y carotenoides: intervienen en el proceso de fotosíntesis.
- Glucolisis y metabolismo de ácidos orgánicos: intervienen en los procesos energéticos de la planta.
El potasio es el catión más abundante en el citoplasma de las células vegetales y tiene un papel destacado en las relaciona planta/agua, jugando un papel importante en la regulación osmótica de las células y los tejidos de las plantas. También se encarga de estabilizar el pH para que se puedan producir las reacciones enzimáticas de crecimiento y desarrollo.
En Tecnicrop contamos con una serie de productos que contienen estos y otros nutrientes que contribuyen al correcto desarrollo de tu cultivo y sus frutos.
Es un abono especial compuesto por macronutrientes (fósforo y potasio asimilable) y micronutrientes (Boro y molibdeno) de rápida absorción. Nutrilized cuaje mejora la calidad y fertilidad del polen y con ello la floración, esta a su vez mejora el proceso de fecundación y por tanto, el correcto cuajado del fruto. Por último, mejora la movilidad y el transporte de azúcares, gracias a la formación de complejos boro-hidratados de carbono, potenciando así el engorde del fruto.
Fosfomax Pro es un abono con alto contenido en fósforo para aplicación por fertirrigación. La formulación polimérica en la que se presenta el fósforo en este producto permite que éste sea asimilado progresivamente por la planta, evitando posibles pérdidas por lixiviación.
En el siguiente gráfico podemos ver la presencia de fósforo en los distintos órganos de la planta en un cultivo de melón:
Estos macro y micronutrientes están involucrados en la mejora del cuajado de frutos, sin embargo, también es muy importante conseguir un mayor rendimiento de este proceso fisiológico, por ello, recomendamos el uso conjunto de estos productos junto con Balancer LS, un bioestimulante de alto rendimiento destinado a estimular y fortalecer los procesos de floración y cuajado de frutos.
La exclusiva tecnología PBS utilizada en Balancer LS incide directamente en el crecimiento y desarrollo de la planta durante todo el ciclo de cultivo, haciendo especial hincapié en las situaciones de mayor demanda energética que son: enraizamiento, floración, cuajado, crecimiento y desarrollo de frutos. Su efecto se produce de forma inmediata, generando una rápida respuesta tras su aplicación.
Entre las acciones de Balancer LS, encontramos:
- Incremento la síntesis de clorofila y, con ello, la fotosíntesis.
- Inducción de la floración.
- Estimulo del proceso de formación de los tejidos vegetales y aumenta su resistencia al producir un refuerzo de la pared celular.
- Favorece el desarrollo de brotes, raíces y hojas.
- Precursor de auxinas, hormonas reguladoras del crecimiento que favorecen la elongación y división celular.
- Precursor de poliaminas, las cuales intervienen en los procesos fisiológicos que van desde la germinación y senescencia floral, hasta la madurez del fruto.
- Regulación de la actividad enzimática, lo que conlleva un menor gasto energético, crecimiento y desarrollo adecuados y aumento de la vitalidad.
Durante el engorde algunos de los problemas más frecuentes son el rajado de la piel del melón y el ahuecado de la sandía, para evitarlos es importante aportar calcio y asegurar su correcta absorción y movilidad, de forma que aportemos elasticidad a la piel. Para ello, desde el departamento técnico de Tecnicrop recomendamos el uso de Nutrilized Ca, una solución líquida de calcio complejado por ácido lignosulfónico, el cual actúa como agente complejante, asegurando que llegue a todos los órganos de la planta.
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